Por Juan José Dalton (*)
A Alicia García in memoriam
madre de Co Madres,
heroína de los DDHH en El Salvador
Este año 2010 El Salvador se ha bañado de vergüenza en cada foro nacional e internacional que he recordado al poeta en su 35 aniversario de muerte y en su 75 aniversario de nacimiento, al denunciarse la impunidad prevaleciente en su caso.
SAN SALVADOR – El pasado sábado 14 de agosto se cumplieron 90 días, tres meses, de cuando la familia de Roque Dalton decidimos, en uso de nuestros plenos derechos, acudir a
Pero también, el pasado 14 de julio, hace un mes, acudimos con nuestros abogados del Instituto de Derechos Humanos de
Resultado: ¡total silencio! No ha habido respuesta a la demanda, mucho menos a la carta enviada hace un mes.
Interpretamos esta actitud como todas las víctimas de violaciones a los derechos humanos en El Salvador lo han podido hacer a la hora que en el pasado y en el presente se les ha negado justicia. Esto evidencia del estado de impunidad que vivimos y en el que sobrevivimos.
A
En el caso de Roque Dalton, uno de sus presuntos asesinos materiales e intelectuales está incrustado en el actual gobierno con el total respaldo hecho público por el mismísimo presidente de
Igual que en el pasado “arenero” los mandatarios cobijaron a generales y coroneles acusados de ser criminales de guerra por masacres cometidas, en la actualidad se hace lo mismo con los victimarios de Roque Dalton, cuya vida y obra constituye un pilar de la cultura salvadoreña.
Este año 2010 El Salvador se ha bañado de vergüenza en cada foro nacional e internacional que he recordado al poeta en su 35 aniversario de muerte y en su 75 aniversario de nacimiento, al denunciarse la impunidad prevaleciente en su caso.
Es decir, se continúa dando un comportamiento ingrato con una personalidad que lo único que hizo y sigue haciendo después de muerto es poner en alto el nombre de El Salvador. Por eso la lucha de su familia tiene el apoyo de universal, con la excepción de sus victimarios pasados y presentes.
Algunas de las muchas pruebas presentadas en
Recién un periodista alemán que vino de Berlín para hacer un reportaje investigativo del caso Dalton me decía algo así: “todo esto me parece extraño porque en Alemania todos los homicidios son imprescriptibles. Pero si alguien confesara en un medio de prensa que sabe de un crimen y no dirá lo que sabe hasta que le dé la gana, inmediatamente sería capturado y llevado a juicio como encubridor y cómplice”.
¿Cuánto tendría que cambiar El Salvador para situarse al lado de la civilidad? Recién el Estado Salvadoreño llevó una moción al Comité de Derechos Humanos de
Sin embargo, interpretando la realidad que vivimos podemos decir que la iniciativa salvadoreña en la arena internacional es cuando menos una acción inconsecuente e incongruente. ¿Por qué? Porque hasta el caso de Monseñor Romero está impune en El Salvador, así como el de la masacre de los jesuitas, las grandes masacres de campesinos de El Mozote y del Sumpul; los asesinatos de los alcaldes, las matanzas de Mayo Sibrián y el crimen de Roque Dalton, entre otros muchos miles.
Están impunes porque no hay verdad ni se quiere investigar ni señalar a los responsables de los crímenes ni se quiere honrar a las víctimas. Cualquier homenaje declarativo sin resolver lo sustancial es eso mismo: una declaración que el viento se la puede llevar y que la historia se puede encargar de borrar.
En adelante, la familia Dalton continuará insistiendo en la búsqueda de la verdad por medios locales e internacionales que sean posibles. Podrá pasar el tiempo, la esposa y los hijos, los nietos y las nietas de Roque Dalton podremos morir de viejos o por cualquier circunstancia, pero no cederemos ni un ápice en la búsqueda de justicia en el caso de nuestro querido poeta, y al mismo tiempo en la lucha contra la impunidad prevaleciente en El Salvador.
(*) Director del periódico digital ContraPunto e hijo del poeta Roque Dalton.